martes, 28 de diciembre de 2010

Osho-Me gustaría que estuvieras centrado en ti mismo para que nada te perturbara,

Me gustaría que estuvieras centrado en ti mismo para que nada te perturbara, para que nada te distrajera, para que todo lo que sucediera a tu alrededor fuera como un sueño y tú permanecieras arraigado en tu ser. Y esto sólo puede ser hecho de una forma: yo he de permanecer absolutamente asentado en mí mismo; vosotros no habéis de ser una distracción. No he de tener en cuenta lo que hagáis; lo único que he de tener en cuenta es lo que mi verdadera naturaleza pueda obrar de forma espontánea.
Y sé que si mi amor no puede transformarte, tampoco lo hará mi ira, porque el amor es una fuerza superior a la ira. Si mi compasión no puede ayudarte, nada te ayudará. Cuanto más alerta estés, más lo percibirás. Eres capaz de soportar mi ira fácilmente; estás condicionado para eso. Pero no puedes soportar la compasión; lo que digo te golpea en lo más hondo y profundo.
Osho-El Verdadero Sabio

miércoles, 22 de diciembre de 2010

viernes, 10 de diciembre de 2010

OSHO. ¿QUÉ ES EL CORAJE?


¿Qué es el coraje?

En principio no hay mucha diferencia entre una persona cobarde
y una valiente. La única diferencia es que el cobarde escucha
sus miedos y se deja llevar por ellos, mientras que la
persona valiente los aparta y continúa su camino. La persona
valiente se adentra en lo desconocido a pesar de todos los miedos.

VALENTÍA es adentrarse en lo desconocido a pesar de todos los miedos. La valentía no es falta de miedo. La falta de miedo surge cuando cada vez te vuelves más valiente. La falta de miedo es la experiencia absoluta de la valentía; es la fragancia de la valentía cuando ésta es absoluta. Pero, en principio, no hay tanta diferencia entre una persona cobarde y una valiente. La única diferencia es que el cobarde presta atención a sus miedos y se deja llevar por ellos, mientras que la persona valiente los aparta y sigue su camino. La persona valiente se adentra en lo desconocido a pesar de todos sus miedos. Conoce el miedo, sabe que está ahí.
Cuando te adentras en un mar desconocido, como hizo Colón, tienes miedo, un miedo terrible, porque nunca sabes lo que puede suceder. Abandonas la orilla de la seguridad. En cierto sentido, estabas perfectamente, pero te faltaba una cosa: la aventura. Te emociona adentrarte en lo desconocido. El corazón empieza a latir de nuevo, estás vivo de nuevo, totalmente vivo. Todas las células de tu ser están vivas porque has aceptado el desafío de lo desconocido.
Aceptar el desafío de lo desconocido, a pesar de todos los miedos, es valentía. Los miedos están ahí pero, si sigues aceptando el reto, poco a poco, esos miedos irán desapareciendo. La experiencia de felicidad que nos produce lo desconocido, el gran éxtasis que empieza a suceder con lo desconocido, te vuelve más fuerte, te da integridad, agudiza tu inteligencia. Por primera vez, empiezas a sentir que la vida no es sólo aburrimiento, sino aventura. Después, poco a poco irán desapareciendo los miedos y siempre estarás buscando alguna aventura.
Pero, básicamente, la valentía es arriesgar lo conocido por lo desconocido, lo familiar por lo no familiar, lo cómodo por lo incómodo, una ardua peregrinación a un destino desconocido. Uno nunca sabe si será capaz de conseguirlo o no. Es apostar, y sólo los jugadores saben lo que es la vida.

OSHO-CORAJE